miércoles, 7 de enero de 2009

POEMAS DE "DECLARACIÓN DE AUSENCIA"






UN HOMBRE BUSCA
Su cuerpo en la noche. Yo

No soy ese hombre. Soy
El cuerpo de ese hombre

Viajando en la noche.





ESTACIONES



1


HONRADAS LAS CENIZAS CON QUE ASCIENDEN
esas alas atrapadas por el peso del vacío.
Honradas y fértiles bajo la espuma
de un cielo húmedo y salvaje.
Sedientos y callados,
habremos de augurar el circunloquio
de un ebrio
que nos cuenta su verdad
y nos olvida.



2


SECAS LAS BRUMAS LOS ATAJOS:
¿dime por qué cantas
señor de la intemperie?
A cada nota los silencios
hablan del andamio de los astros.
Yo sostengo que he vuelto
a rodar sobre las playas.
Muerto y frecuentado por los otros
habré un día de llegar
donde mi cuerpo se esconde



3


ESCRITOS ESTAN LOS DESIGNIOS DEL LODO.
A su lado descansan
ciertos rostros ausentes.
Quien los viese diría
que la espera se oculta al final
bajo las piedras.

La espera: ha de venir con los trenes.
Me mirarás y habrás marchado.
Seco ser entre las brumas
se encierra tu epitafio.


4



DE LEJOS LA MAREA cesa
de crecer en nuestros vientres.
Hay algo de ángeles.
Y algo de locos.
Y algo de poetas.
Algo de caer azules
sobre los mares incoloros.
La noche y su destino.
La luna y su cobijo.
Seco mis ropas al sol de la costumbre.
Para que canten.
Para que sean libres
y yo canto.




DECLARACIÓN DE AUSENCIA


Palabra de viento, silencio que habla, dime
¿Dónde está tu madre? ¿Dónde
El tejido de sus horas,
Sus noches sin noche,
Su fuego que se oculta y me habla de ti.
Y entre ráfagas de sombra
Socava la luz, la puerta falsa, la cocina?
¿He de esperar que regrese?
Palabra de agua mis obsesiones fluyen atascadas.
Mis ideas me piensan, mis rastros me caminan.
Pero no, hijo mío, Telémaco, no es del dolor que te hablo.
¿Dónde está tu madre?
Palabra de atajo, comprende mi extravío.
Hace meses que despierto sin haber dormido.
¿Estaré soñando? ¿Estaré buscándola?
Sólo escucho sirenas.
Sirenas y naufragios cotidianos.
Luces rojas que anuncian su partida. En mis ojos
Se incendia la casa, se incendia la historia.
Y yo no lo creo.
Y yo no lo creo.




LA CANCIÓN DE LAS MAREAS


Convocado por el lodo.
Amado y desterrado por el miedo.
Luz de esos campos regidos por la noche.
El viento de una tarde se agita en mis papeles.

Miro el olvido:
El corazón que huye.
Es una flor creciendo en los arbustos.

Me preguntaste por la historia.
En tus manos se agitaban los peces.
En mi casa los náufragos dibujaban paisajes.
Ebrios
Perseguían a sus sombras
Y olvidaban el fondo del mar.

Me preguntaste por un barco
De arena y de musgo.
Mis palabras permanecen allí,
Detenidas.

Tú las miras venir hacia ti.
Acaricias su silencio.


¿Escuchas?


Hay algo que ha crecido al margen de nosotros.
La música, la tarde, la cocina.
Al abrir mis ojos, apareces.
Al abrir mis ojos,
Ya no estás.
La ausencia es este mar que aprenderá a quedarse.




VIAJE


Mi cuerpo es mi viaje.
Mi forma de partir o de quedarme
Detenido en una huella
Que tal vez crecerá hasta alcanzarte.
En el fondo del mar
O en la ciudad sin fondo en que te pierdes
Mi forma está presente como un eco.
Espejo de una voz antigua que se mira y te recuerda.
Sonrisa abrazada a la tristeza.
Sonrisa hermana de los puentes.
Tú eres mi puerta entreabierta.
Mi ventana a la noche.
Desde allí te miro.
Y me veo alejar.




LECTURA PARA CIEGOS



1


Frente a la ventana: un árbol
Creciendo sobre una azotea.
Una mujer:
Colgando sus sueños en un cordel.
Un perro:
Olfateando los últimos restos de la noche.
Frente a la ventana:
Otra ventana. Y un hombre,
Cuya mirada se ha extraviado.
Entre tantos árboles
Azoteas perros
Sólo importan la mujer
Y el hombre.
Muchos sueños colgando de un cordel
Y una mirada extraviada que los busca.
Frente a la ventana: otra ventana:
Un hombre una mujer
Amándose.



2



¿Cómo lavar este paisaje?

¿Cómo alcanzar aquello
Que se oculta en los sueños
Y en el tiempo que camina por los techos?
Y ¿qué rostro mirar que sea nuestro
Y no la terrible apariencia
De algo que existe más allá de la mirada?
Y ¿qué decirle a esta mujer que lava
El pasado de los hombres
Y su propio pasado?

Sólo preguntas podemos ofrecer.
Sólo preguntas que la mujer recibe
Y lava y cuelga
En el mismo cordel, en donde yacen
Secas y arrugadas las respuestas.




(Del libro "Declaración de Ausencia" / Asaltoalcielo Editores 1999)

3 comentarios:

Andrea Breq dijo...

Un placer disfrutar de la lectura de tu poesía...

Un abrazo y buena noche,


A.

Juan de la Fuente Umetsu dijo...

Gracias, Andrea.
Un abrazo,
Juan Carlos

Mixha Zizek dijo...

leí esta entrda y aproveché de releerte, besos